El presidente de Aerolíneas Argentinas, Mario Dell’Acqua, presentó junto al gerente general Abbot Reynal los balances de la compañía por primera vez en 21 años en tiempo y forma y Austral después de 13 años. De dichos balances se deduce que en 2017 los ingresos de la compañía se incrementaron un 97% respecto al año anterior, mientras que las pérdidas se redujeron un 32%.
Según Iprofesional, la línea aérea de bandera aseguró que recurrirá al mercado financiero para reducir su deuda, que decreció del 38% al 36% de sus activos. «Ya no hace falta seguir pidiéndole plata al conjunto de los argentinos, para ese nivel de pérdidas, podemos cubrirlo tomando prestado del sistema financiero» dijo Dell´Aqua.
En 2017, Aerolíneas consiguió subsidios por u$s183 millones, mientras que en 2018 se reducirá a u$s82 millones. Se trata de una fuerte baja, ya que llegó a aportes estatales por casi u$s900 millones en 2012 y de u$s600 millones en promedio durante la gestión kirchnerista. Con la llegada de Cambiemos, y de Isela Costantini, la ayuda fue de u$s302 millones.
«Hoy, Aerolíneas y Austral facturan en conjunto unos u$s2.600 millones, de modo que si el año que viene llegáramos a tener un déficit de entre 20 y 30 millones de dólares será el equivalente a menos del 2% de la facturación», remarcó el ejecutivo.