Deja un comentario Los líderes españoles triunfan desde hace muchos años en el mundo hotelero del Caribe con cadenas propias –Riu, Meliá, Barceló, Iberostar, Bahía Príncipe y Palladium, entre otros–, pero una nueva generación está ya instalada también en los puestos claves del desarrollo de los planes hoteleros de los principales gigantes turísticos norteamericanos, los más ambiciosos para crecer en la región.
Los referentes de estos proyectos son el mallorquín Javier Coll (ALG) y los catalanes Jordi Pelfort (Sunwing) y Jordi Solé (Transat) –recién nombrado como adelantó REPORTUR.mx— como responsables de expandir las divisiones hoteleras de los gigantes turísticos de Estados Unidos y Canadá, los dos primeros con indiscutible éxito desde hace un tiempo (ALG pide incentivos y seguridad a los políticos de Latam y Caribe).
El vicepresidente ejecutivo y director de estrategia de Apple Leisure Group, Javier Coll, es un claro ejemplo de ejecutivo español que con más de dos décadas de carrera, ha dirigido el crecimiento y desarrollo, las fusiones y adquisiciones, y las finanzas y la estrategia del grupo que encabeza Alex Zozaya, que es el que más rápido ha crecido en el Caribe desde el cambio de milenio (Récord de ALG en 2017 a pesar de los terremotos en México y Caribe).
De su lado, el director general de Blue Diamond Resorts –la división hotelera de Sunwing– desde octubre de 2010, Jordi Pelfort, ha liderado la fuerte expansión hotelera que en los últimos años viene registrando el grupo propiedad de Stephen Hunter y Tui (Blue Diamond administrará el mayor ‘todo incluido’ de Antigua).
Exejecutivo de Sunwing y procedente de Iberostar, Jordi Solé, fichado recientemente en Transat, tiene como objetivo desarrollar la futura cadena de resort en el Caribe y México, con la que pretende seguir la estrategia de ALG y Blue Diamond Resorts, aunque sus referentes ya llevan un camino muy amplio recorrido, hasta situarse entre las cinco primeras de más habitaciones en la región (Ofensiva de Transat por Cuba y el Pacífico mexicano con nuevas rutas).
El talento español, así, es el que se está volviendo a imponer para liderar la expansión hotelera en el Caribe, aunque esta vez para grupos turísticos norteamericanos en lugar de para propietarios españoles, pues las grandes cadenas vacacionales de ese país cada vez tienen los ojos más puestos en dar prioridad a crecer en Asia al ver la región menos madura y con más potencial de crecimiento.
