1 comentario Los líderes del turismo mexicano acogieron con estupor y rechazo la iniciativa de la senadora Luz María Beristain Navarrete que propone regular el ‘todo incluido’ para restringirlo. Algunas de las principales voces de la industria se comunicaron con REPORTUR.mx para expresar su más profundo desacuerdo con esta propuesta.
La Comisión de Turismo del Senado de la República aprobó la pasada semana la iniciativa de Luz María Beristain Navarrete que propone regular el turismo todo incluido, con el fin de que el turista tenga el derecho a solicitar en cualquier momento la cancelación de los servicios contratados, en cuyo caso no se podrá establecer una penalización desproporcionada.
Los representantes con más peso del turismo mexicano manifestaron que esta propuesta tendría efectos terribles para la industria, pues el enorme grueso de los clientes del país demandan el producto ‘todo incluido’, sin el cual México se arriesgaría a perder una parte muy grande de su consumidor (Proponen en el Senado mexicano restringir el ‘todo incluido’).
La restricción del ‘todo incluido’, a juicio de líderes de asociaciones y de los principales empresarios, supondría minar a una industria que sustenta a cientos de miles de familias en México, además de poner también en riesgo a la clientela de micro, pequeñas y medianas empresas turísticas, que perderían sin el atractivo del ‘todo incluido’ a gran parte de sus potenciales clientes.
Entre los líderes turísticos existe incomprensión hacia la propuesta promovida por Luz María Beristain Navarrete, pues creían que la realidad y sus cifras había sido tan contundente como para acabar con unos tópicos que se han demostrado infundados, mientras la senadora acusó al sistema capitalista de haber provocado las condiciones de competencia inequitativas.
El mundo del turismo considera que la oferta complementaria a la que alude la senadora si no tiene éxito es porque no se adapta a las necesidades ni los mínimos de calidad que demanda el cliente, en lugar de deberse al ‘todo incluido’, que es el producto responsable de traer al enorme grueso de turistas al destino.
La industria turística se ha mostrado clara en defender las bondades del ‘todo incluido’, un tipo de establecimientos tiene normalmente el doble de empleados que un hotel que opere con el plan europeo tradicional, como ha venido recogiendo REPORTUR.mx (Encendida defensa de Zozaya de las ventajas del modelo all-inclusive).
Los mayores grupos turísticos estadounidenses recuerdan que la estancia media en este tipo de establecimientos es un 30 por ciento mayor a la de un hotel tradicional, al tiempo de que el éxito del ‘todo incluido’ obedece a que el cliente lo percibe como el que ofrece más libertad, y reveló que “cada hora que el cliente pasa fuera del hotel, ganamos más”.
A Cancun le pasará lo mismo que al pueto de Acapulco,habrá mas turismo en las calles,mas narcomenudistas y mas delincuencia, siempre ha representado un freno ,los hoteles todo incluido,para los vendedores de droga, y en Acapulco no había casi ese concepto,por lo que rápido se propagó la droga.