Un avión de la aerolínea chilena con 48 pasajeros aterrizó con los parabrisas rotos tras haber perdido un motor. Debió aterrizar en Luque, Paraguay, pero se desvió a la ciudad brasileña de Foz de Iguazú.
Latam informó que tanto los pasajeros como la tripulación aterrizaron en buenas condiciones y lamenta los inconvenientes que esta situación meteorológica pueda haber causado.