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Casi tres años después de implementarse en Quintana Roo la regularización de las rentas vacacionales que se ofrecen a través de diversas plataformas digitales, solo el 37 por ciento de los anfitriones se han registrado ante la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan).
En efecto, de acuerdo con el Secretario de Turismo de la entidad, Bernardo Cueto Riestra, apenas 30 mil de estos establecimientos han tramitado su licencia de funcionamiento, lo que significa que cumplen con todos los requisitos para garantizar la seguridad de sus huéspedes, mientras que otros 51 mil operan de manera irregular.
Una de las características de la renta vacacional en destinos como Cancún y la Riviera Maya, es el sostenido crecimiento de este tipo de negocios. En 2019 la Secretaría de Turismo anunció que el 80 por ciento de los entonces 14 mil sitios identificados, ya se habían acercado a la Sefiplan para integrarse al registro estatal. Hoy en día la cifra de unidades bajo esta modalidad supera las 80 mil.
La asociación de complejos vacacionales y turísticos (Acotur) destaca que en estas 80 mil unidades no solo están las que se ofrecen a través de Airbnb, sino también a través de otras plataformas como Booking y hasta en redes sociales.
Esta situación fue confirmada por el secretario de Turismo, quien explicó que están tratando de ubicar estos alojamientos que no están dados de alta en ninguna plataforma, sino que se ofertan por medios como Facebook. El propósito es “garantizar un piso parejo frente los hoteles establecidos, además de verificar que cumplan con todas las medidas de seguridad”.
Las autoridades señalan que la falta de regularización afecta la imagen de Quintana Roo como destino turístico, ya que se han reportado quejas de turistas quienes dicen haber sido víctimas de fraude, pues cuando contrataron los servicios de estos alojamientos les aseguraron que tendrían vista al mar, cuando la realidad es que las casas o cuartos se encontraban en las zonas populares de Cancún o Playa del Carmen, y alejadas de las playas. A esto se suma la evasión del pago de impuestos municipales y estatales.
Como reveló REPORTUR.mx, el dilema entre la hotelería organizada y las rentas vacacionales es algo que ha ocurrido en todo el mundo, ya lo han vivido muchas ciudades que ya aprendieron como ponerle reglas a la renta vacacional para que tenga la seguridad y la calidad suficientes (Cancún exige a la renta vacacional normas e impuestos como a hoteles)
Muy bien que los regularizen, así será justo e igual para todos los que se dedican a este giro que le a traído un nuevo tipo de cliente al destino, el cual deja una derrama económica en mucho mayor cantidad a los negocios de comercio y servicios en la ciudad y comunidades a dónde los huéspedes de hoteles all inclusive normalmente no van
Claro, es volver cuando los hoteles eran plan europeo y el centro de Cancún era padrísimo, lleno de turistas de alto nivel económico y el centro de Cancún lleno de restaurantes y bares. Los hoteleros deberían dejar de ser envidiosos con los que tienen esos negocios de Airbnb y similares como hostales ya que gracias a ellos si hay una verdadera derrama para los pequeños comerciantes de Cancún aunque no cómo era antes ya que ustedes hoteleros se quedan con los de alto poder adquisitivo, así que dejen de ser egoístas, estos turistas no podrían hospedarse en sus hoteles.
Muy preocupados por el Airbnb y las autoridades estatales y municipales se hacen de la vista gorda en erradicar narco tienditas o la inseguridad, les faltan webs 😉
Así es, persigan a los delincuentes verdaderos y no estos pequeños empresarios.
Evaden los problemas grandes de Quintana Roo y se dedican a molestar a la gente que trabaja. Y si dejan de robar un poco los políticos no ayudaría también? O darnos seguridad? O combatir el sargazo? O mantener los arenales de las playas? O mejorar la infraestructura? O promocionar el destino como se debe?