Deja un comentario El diputado de UNEN Fernando Sánchez evaluó la situación entre la presidenta del gobierno argentino Cristina Fernández y el empresario Lázaro Báez y calificó el contrato que ambos mantenían con uno de los hoteles como «maniobras de evasión impositiva o maniobras de lavado de dinero o ambas cosas».
«Para que una empresa le alquile a la presidenta de la Nación inmuebles tan caros como hoteles en el sur de la Argentina sin que nadie los vaya a usar, o son maniobras de evasión impositiva o maniobras de lavado de dinero o ambas cosas”, comentó el dirigente de UNEN.
En declaración para radio Mitre, Sánchez señaló que en el 2003, durante los diez años de presidencia de Néstor y Cristina Kirchner, Lázaro Báez crea la empresa Austral Construcciones y se vuelve una persona rica, poderosa y de las más beneficiadas por la obra pública y decisiones administrativas del Gobierno nacional.
Según publica el cronista.com, para Sánchez, el círculo entre el empresario y la Presidenta se cierra cuando Báez decide «devolverle el favor contratando o simulando contrataciones de servicios hoteleros, únicamente para poder otorgarle enorme sumas en pagos a la presidenta de la Nación».
Estas declaraciones surgieron luego de que las oficinas de Báez fueron allanadas por evasión tributaria y lavado de dinero tras la denuncia que hiciera una periodista en la que se decía que Baéz le pagó casi 3,2 millones de pesos a los Kirchner en concepto de «alquiler» del hotel Alto Calafate, en el marco de acuerdos confidenciales.
