En la incipiente temporada ya se registran más de 100 casos de estafas por alquileres fraudulentos en la costa argentina.
Tal como viene sucediendo en los últimos años y pese a las advertencias de verificar la web, el prestador y demás precisiones de los inmuebles en las ciudades balnearias de Argentina, las estafas ya han sido denunciadas principalmente en Mar del Plata, Pinamar, Villa Gesell y San Bernardo.
La pérdida económica por cada estafa ronda los 15 mil pesos, que son los adelantos que se pagan para «asegurar» el alquiler. En la mayoría de los casos son transacciones provenientes de avisos clasificados o páginas de internet que publican sin la identificación de una agencia de viajes o inmobiliaria, con un mero número de celular y que exigen un adelanto para garantizar la contratación.
Según avances en la investigación de estos delitos; las estafas fueron realizadas desde varias provincias (Santiago del Estero, Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires) cuyas operaciones las realizaron vía web y recibiendo pagos a través de una cuenta bancaria o por correo postal.
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