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La naviera Buquebus que opera entre Argentina y Uruguay le solicitó al Ministerio de Trabajo la apertura de un procedimiento preventivo de crisis, con el fin de poder suspender desde el primero de abril y sin el pago de los sueldos a todo su personal en Argentina, unos 500 trabajadores.
Entre los motivos que destallan en el escrito presentados, acusan la “falta de trabajo” por el cierre de fronteras a causa de “fuerza mayor”; por los que no pueden pagar los suelos, pero aseguraron que no habrá despidos. “Es voluntad de la empresa recurrir a las suspensiones solicitadas y no suprimir fuentes de trabajo, ello con la esperanza cierta de un mejoramiento de la situación sanitaria que es dable esperar a la brevedad”, relata el escrito.
A su vez, la compañía describe la situación que vive desde la implementación del decreto 274, dictado el 16 de marzo, por el cual se prohibió el ingreso a la Argentina, por un plazo de 15 días corridos, a las personas extranjeras no residentes en el país a través de puertos, aeropuertos, pasos internacionales, centros de frontera y otros accesos.
Por lo cual, Buquebus disminuyó drásticamente su actividad y desde el 22 del dicho mes todos los buques están parados. “Consecuentemente, con ello se ha suspendido la venta de pasajes”, tal como lo expresaron en el escrito. (Buquebus deja de operar tras descubrir caso de Covid-19 a bordo)
La totalidad de empleados que tiene Buquebus en ambos países es de 1200 empleados, 500 son argentinos y el resto uruguayos. En relación a los 700 empleados del país vecino, la empresa apelaría allí a que los trabajadores recurran al “seguro de paro”, un subsidio por desempleo por el cual el Estado se hace cargo del pago de un porcentaje del salario de manera temporaria.
