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Tras más de un año y medio en una situación crítica, los hoteles boutique y pequeños de la ciudad de Buenos Aires se están vendiendo a precios por debajo de su valor y se vuelven una oportunidad para las grandes cadenas.
En los barrios de San Telmo y Palermo especialmente, en inmuebles históricos o petit hotels, la oferta de este tipo de propiedad crece en tanto el turismo no se reactiva y al ser hoteles independientes tienden a desaparecer.
«Hoy podemos ver muchos hoteles familiares, hostels o pequeños alojamientos a la venta. En la mayoría de los casos sus principales clientes eran jóvenes estudiantes o los clásicos mochileros que por la pandemia dejaron de llegar a la capital», indicó Roberto Amengual presidente de la Asociación de Hoteles de Turismo (AHT) al diario Iprofesional.
Según datos brindados por dicha asociación desde el comienzo de la pandemia cerraron definitivamente entre 1.700 y 2.000 establecimientos, cuyo número sigue en ascenso.
Lo cierto es que hoy hay sobrestock de este tipo de unidades y poca demanda pero según los especialistas inmobiliarios hay verdaderas ofertas que podrían llegar a aprovechar las grandes cadenas, previendo un boom de la capital cuando mejore el panorama sanitario y la moneda local esté muy devaluada respecto a la región.
