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Las aerolíneas de bajo costo tienen claro cuál es su negocio para ser rentables, precios bajos, volúmenes altos de pasajeros, lo que les permite ganar participación en el mercado.
”Para ello es necesario que la aerolínea nazca como aerolínea de bajo costo, porque desde un principio debe operar bajo unos postulados de eficiencia que no pueden ser adoptados más tarde, por esto es difícil que una aerolínea tradicional se transforme en aerolínea de bajo costo”, dijo Alfonso Ávila Velandia, presidente de Easyfly a la revista Dinero.
El “efecto viva”, según el Presidente de Viva Colombia, Juan Emilio Posada, es la guerra de tarifas que se ha generado en el mercado, considera también que las aerolíneas de bajo costo en el mundo han llegado a tener hasta el 35% y 40% de participación en el mercado. “Para nosotros la mezcla más óptima no es precio muy alto y volumen muy bajito, sino al revés, nos interesa que el precio sean muy bajito y el volumen muy alto”, afirma Posada a la revista.
El tema de las constantes alzas al precio del combustible lo tienen contemplado con planes que van desde acuerdos a largo plazo hasta cancelaciones de vuelos cuando el volumen de pasajeros no es suficiente para operar el vuelo. “Lo que nuestro cliente quiere es reducción de costos y para él es mucho mejor negocio esperar unos días para viajar si lo puede hacer más barato. Lo importante es que no son viajeros de negocios que tienen que irse obligatoriamente en una fecha específica”, explica a la revista, Posada.
Ávila habla de ser competitivos basado en dos estrategias, una la selección del mercado objetivo y la otra tener un servicio diferencial. Tal vez para EasyFly no sea tan fácil cancelar los vuelos pues el perfil que viaja por EasyFly son en un 75% hombres de negocios y el otro porcentaje está entre viajeros de salud y estudiantes, así lo informa la revista Dinero.
