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La reactivación turística y la alta demanda de hospedaje y vivienda en Quintana Roo han disparado los fraudes inmobiliarios, la mayoría realizados a través de redes sociales.
De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), de septiembre de 2021 a marzo de 2022 se reportaron mil 129 denuncias por este tipo de delitos, en los cuales a la víctima se le solicitó un depósito en efectivo para rentar una vivienda, ya sea para vacacionar unos días o vivir por algunos meses, para que al final resultara que el supuesto arrendador ni siquiera era dueño de la propiedad.
La Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) capítulo Cancún, destacó en su oportunidad que estos fraudes se han incrementado casi 40 por ciento en el último año, pero solo una de cada tres víctimas llega a denunciar estos hechos. La mayoría terminan por solo quejarse en redes sociales, ya sea porque vienen de otras entidades y no pueden darle seguimiento a su denuncia, o porque simplemente no quieren perder el tiempo con este proceso.
Miguel Ángel Lemus, presidente de la AMPI Cancún, señaló en su momento que este problema se debe a la venta informal que se realiza a través de las redes sociales, con transacciones que no están validadas por agentes calificados ni con garantías jurídicas. De acuerdo con la información obtenida por Transparencia de la Fiscalía General del Estado (FGE), el 70 por ciento de estas estafas inmobiliarias ocurren en Playa del Carmen, Puerto Morelos, Tulum y Cancún.
