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La fundación mexicana “Mi Último Deseo”, constituida en 1993 para brindar el apoyo necesario para que niños y jóvenes enfermos de cáncer realicen sus sueños y darles una razón más para seguir adelante, y Bahía Príncipe Rivera Maya Resort se sumaron como cada año al programa “Ángeles Viajeros”, que consiste en un viaje para niños en fase terminal, cumplirles el sueño de conocer un lugar maravilloso y para muchos ver el mar por primera vez.
El gran recibimiento estuvo a cargo de los directores y colaboradores del Hotel Grand Bahía Príncipe Cobá. Entre las actividades que llevaron a cabo durante su estancia, se incluyó la Cena-Espectáculo Gran Fiesta Mexicana en la Hacienda Doña Isabel, donde con gran entusiasmo jugaron y cantaron durante toda la velada.
Como parte de la agenda de estos cinco días, se programaron actividades de contacto con la naturaleza y la cultura maya, como la Caminata Ecológica, la siembra de un árbol, de la mano de la Fundación Ecológica Eco-Bahía.
Entre otras actividades, disfrutaron del waterpark, clases de beat box, actividades en la playa, fiesta de colores, una espectacular cena temática de piratas y hasta una pequeña clínica de golf en el Riviera Maya Golf Club.
“Para el equipo que conforma Riviera Maya Golf Club es una alegría que los más pequeños aprendan a jugar golf de forma divertida. No fue la excepción esta tarde, que disfrutamos ver las caras de estos niños tan especiales en el campo y en las instalaciones de la Casa Club”, comentó Khiabet Alvarez, gerente de Marketing.
Por su parte Wendy Pérez, gerenta de Marketing de Bahía Príncipe Riviera Maya y quien estuvo acompañando al grupo, comentó: “Nos quedamos con sentimientos encontrados porque las enseñanzas de vida de estos pequeños son una lección para todos”.
Tomás López Jiménez, presidente de la Institución Mi último Deseo A.C., agradeció a Bahía Príncipe Riviera Maya por su invaluable ayuda a sus “ángeles viajeros” durante todos estos años. Ignacio Subías Cano, director general, agradeció no sólo en nombre del complejo, sino de todo el Grupo Piñero, por poder poner un granito de arena, que permita que esos niños sientan la felicidad-
“Para nosotros es un enorme gusto y estamos agradecidos por haber compartido estos días con todos ellos. Este tipo de colaboraciones con Asociaciones como ‘Mi Último Deseo’ es para nosotros de vital importancia, ya que estas iniciativas fomentan el bienestar social y en este caso relacionado con la infancia, que es un sector prioritario dentro de nuestra actividad de responsabilidad social”, comentó.
