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La Comisión Europea ha manifestado que si IAG, matriz de Iberia, absorbe a Air Europa «podría restringir la competencia» y en el pliego de condiciones sobre la propuesta que ha enviado este viernes expresa al mismo tiempo su temor a «que los clientes sufran una subida de los precios o una disminución de la calidad de los servicios tras la operación».
Bruselas afirma que el grupo hispanobritánico deberá reaccionar antes del próximo 10 de junio: «IAG tiene ahora la oportunidad de responder al pliego de cargos de la Comisión, de consultar el expediente de esta y de solicitar una audiencia. IAG también tiene la posibilidad de proponer soluciones para despejar las reservas preliminares en materia de competencia señaladas por la Comisión».
El documento conocido este viernes representa una evaluación de la operación tras un análisis más detallado, pero que no tiene en cuenta la propuesta de ceder el 40% de los vuelos comercializados por Air Europa en 2023, según aseguran a Expansión fuentes de Iberia.
Asimismo, tampoco se tiene en cuenta el compromiso de que en ninguna de las rutas se generaría un monopolio si culmina la compra por parte de IAG de la filial de Globalia, con la que como reveló REPORTUR.us sumaría 200 aviones (Iberia aspira a tener 200 aviones tras la absorción de Air Europa).
Así se recoge en el ‘Statement of Objections’ (SO) sobre la operación de compra de Air Europa, publicado en la tarde de este viernes, en el que la Comisión ha explicado que la posible compra «supone efectos adversos para la competencia principalmente por la reducción del número de aerolíneas que operarían en ellas».
En concreto, explica que esta compra reduciría la competencia en un determinado número de rutas nacionales españolas, en particular en las rutas donde los trenes de alta velocidad no ofrecen una alternativa, y en las rutas entre península España y Baleares y Canarias.
La competencia también sería limitada en las rutas de corto radio que conectan España con países de Europa y Oriente Medio. Nuevamente, la competencia en estos viajes proviene principalmente de compañías aéreas de bajo coste, como Ryanair, que en muchos casos operar desde aeropuertos más remotos o desde la aerolínea establecida del país de destino. La competencia también sería limitada en las rutas de corto radio que conectan España con países de Europa y Oriente Medio
En el caso de América, se podría dar incluso el caso de que no hubiera competencia directa después de la transacción. Además, la Comisión ha apuntado que ambas partes tienen cuotas de mercado relativamente altas en las rutas entre España y América del Norte y del Sur.
Iberia ha manifestado que esperaba que la Comisión Europea manifestase su preocupación sobre los efectos adversos para la competencia en varias rutas, tanto domésticas y europeas como rutas a América, principalmente por la reducción del número de aerolíneas que operarían en ellas.
Iberia propuso en noviembre de 2021 a la Comisión Europea la cesión de slots hasta en 24 rutas que compartía con Air Europa, como Miami o Montevideo, con el fin de que Bruselas le facilitase la absorción de la aerolínea de Globalia.
Iberia, integrada en IAG, planteaba la cesión a World2Fly, propiedad del Grupo Iberostar, de seis conexiones semanales en la ruta de Miami y otras cuatro en la de Montevideo, aunque en ambos casos se abre la puerta a alguna más, mientras que ahora también contempla cesiones a Plus Ultra.
Iberia también lo propone para algunas frecuencias en las conexiones con Santo Domingo, Bogotá, Buenos Aires, Quito, Guayaquil y Lima, pero solo si las aerolíneas no consiguen slots, algo improbable ya que hasta ahora ninguna aerolínea ha dejado de operar ningún vuelo intercontinental desde Madrid por falta de disponibilidad en una franja horaria.
Bruselas busca que la concentración no aminore la competencia en el aeropuerto de Madrid pese a ser esta una característica de los principales aeropuertos europeos –Charles de Gaulle de París, Fráncfort y Ámsterdam, donde tienen sus hubs Air France-KLM y Lufthansa, ambas participadas por los estados francés y alemán, que son a su vez los más influyentes en la Comisión Europea.
Iberia operaba hacia 25 ciudades de América y Air Europa, con 24, y ambas se solapaban en 14 destinos. Como recogió REPORTUR.com.ar, Bruselas reconoce la difícil situación financiera por la que pasa Air Europa, por lo que ha incluido en la documentación que prepara la opción de quiebra de la aerolínea en el caso de no finiquitarse la compra por parte de Iberia (La quiebra de Air Europa es una opción para la Comisión Europea).
